En este mensaje, Su Majestad el Rey expresa sus sinceros deseos de salud y felicidad a los Soberanos de Jordania y a la ilustre familia real, implorando al Todopoderoso que perpetúe sobre el Reino hachemita de Jordania los beneficios de la seguridad, la prosperidad y el bienestar.

El Soberano aprovechó la ocasión para saludar las distinguidas relaciones fraternales que unen a los dos países, expresando su convicción de que estas relaciones seguirán desarrollándose para alcanzar nuevos logros, satisfacer las aspiraciones de los dos pueblos y servir a sus intereses comunes.